Harry Potter y la Cámara Secreta - Chris Columbus
Hace mucho, mucho tiempo (en esta misma galaxia), vi la primera película de Harry Potter. No he leído los libros, a priori, las aventuras para adolescentes de un mago preadolescente no podrían tentarme menos. El caso es que, para mi sorpresa, los años siguen pasando, esos adolescentes se han hecho adultos y, algunos —ya no tantos, en realidad— siguen hablando bien de esos libros o de las películas, así que decidí darle una oportunidad a la segunda, aunque Laura ya me había avisado de que las películas eran, en general, bastante malas.
Mi recuerdo sobre la primera peli es, así de simple, malo. Bastante malo. Un suspenso claro, vaya. Un 3, por ejemplo. Aburrida, con personajes más planos que el encefalograma de un guiñol, con peores actuaciones infantiles que las obras de teatro del cole (el que hace de Harry Potter parece de cartón piedra, o algo...), con un doblaje en castellano, a cargo de Bruno Ramos, que debería ser recordado siempre y puesto como ejemplo a los futuros actores de doblaje de cómo NO se hace. La voz de Ron es, sencillamente, ridícula. Evidentemente, no sé si se recalca en los libros que cuando Ron habla la gente se ríe de él por su voz... todo es posible, ¿no?).
El caso es que la segunda película, sin ninguna duda. Me ha parecido horrible.
El argumento es cutre y, además, me parece muy mal llevado. Hay una cámara secreta en la que vive un semilla estelar de Cthulhu, más o menos, que hace un De la carne a la piedra de toda la vida a los hijos de los muggles (los no magos que tienen hijos magos, vaya) y les va a matar a todos, snif, snif. Es una película de Harry Potter, así que va a ir de cómo Harry Potter, el de la voz ridícula y su amiga pseudofelina se enfrentan al mal y ganan; así que por ese punto tampoco hay precisamente nada atractivo. La película dura dos horas y cuarenta minutos, lo que juega absolutamente en su contra; pues no es capaz de captar la atención —no la mía, al menos— durante tanto tiempo. Se comenta en internet que es la película más fiel al libro.
Audiovisualmente es aceptable. No tiene unos grandes efectos —me parece un poco mal en una película de magos— pero se defiende. La música está bien, al fin y al cabo es de John Williams, que es capaz de vendernos una y otra vez la misma melodía con pequeños cambios y que siga molando. El resto, en realidad, no merece ni siquiera ser nombrado.
Nota: 2,5. Banda sonora y las pequeñas apariciones de Alan Rickman suman, el resto resta.
Sacando que seas un fan de la saga o quieras ambientar una partida de rol en un colegio de magos, no te tomes la molestia. Es mala de cojones.
Mi recuerdo sobre la primera peli es, así de simple, malo. Bastante malo. Un suspenso claro, vaya. Un 3, por ejemplo. Aburrida, con personajes más planos que el encefalograma de un guiñol, con peores actuaciones infantiles que las obras de teatro del cole (el que hace de Harry Potter parece de cartón piedra, o algo...), con un doblaje en castellano, a cargo de Bruno Ramos, que debería ser recordado siempre y puesto como ejemplo a los futuros actores de doblaje de cómo NO se hace. La voz de Ron es, sencillamente, ridícula. Evidentemente, no sé si se recalca en los libros que cuando Ron habla la gente se ríe de él por su voz... todo es posible, ¿no?).
El caso es que la segunda película, sin ninguna duda. Me ha parecido horrible.
El argumento es cutre y, además, me parece muy mal llevado. Hay una cámara secreta en la que vive un semilla estelar de Cthulhu, más o menos, que hace un De la carne a la piedra de toda la vida a los hijos de los muggles (los no magos que tienen hijos magos, vaya) y les va a matar a todos, snif, snif. Es una película de Harry Potter, así que va a ir de cómo Harry Potter, el de la voz ridícula y su amiga pseudofelina se enfrentan al mal y ganan; así que por ese punto tampoco hay precisamente nada atractivo. La película dura dos horas y cuarenta minutos, lo que juega absolutamente en su contra; pues no es capaz de captar la atención —no la mía, al menos— durante tanto tiempo. Se comenta en internet que es la película más fiel al libro.
Audiovisualmente es aceptable. No tiene unos grandes efectos —me parece un poco mal en una película de magos— pero se defiende. La música está bien, al fin y al cabo es de John Williams, que es capaz de vendernos una y otra vez la misma melodía con pequeños cambios y que siga molando. El resto, en realidad, no merece ni siquiera ser nombrado.
Nota: 2,5. Banda sonora y las pequeñas apariciones de Alan Rickman suman, el resto resta.
Sacando que seas un fan de la saga o quieras ambientar una partida de rol en un colegio de magos, no te tomes la molestia. Es mala de cojones.
Bien es cierto que las películas nunca superan a los libros, y una historia como esta es imposible meterla por completo en un largo metraje.
ResponderEliminarAlgo que puede hacer fallar a las películas de esta saga quizás sea que el director cambie en todas las entregas,e xceptuando las dos primeras que van de la mano de C. Columbus si no me equivoco.
No la calificaría como tan horrible y mala como describes. Hay que destacar que la película es una película para niños. Es normal que una persona adulta como tú no la vea de la misma manera. Porque, seamos realistas, tampoco vamos a intentar buscar la maravilla del séptimo arte, porque ya no se hacen cosas originales. Pero la función que busca es ser un filme de magos para niños, y creo que eso lo consigue. Por más que la gente se queje de que esté mejor o peor adaptada, muchos van a verla al cine y la esperan con impaciencia.
Para conocer bien algo hay que estudiarlo. Podrías leerte los libros de Harry Potter, alomejor te gustaba y todo o no, pero claro, el problema es el de antes. Tu visión es el de una persona adulta. Seguramente no entendrías Pinochio o Alicia en el país de las maravillas, si lo leyeses ahora de nuevo. La visión cambia con el tiempo porque nosotros cambiamos también. Es normal que a los niños les entretenga, yo lo he leído y es de lectura fácil. No ´se si podría decir que contiene moraleja o no, pero creo q los niños aprenderían algo con ella.
Una buena obra para niños es una buena obra y punto. Y si la lees como adulto te das cuenta de ello. El Principito con su tono para niños mola un huevo y medio, y es así de sencillito.
ResponderEliminarNo sé si los libros estarán bien o no, en cualquier caso sí puedo decir, sin ningún tipo de temor que esta película es horrenda y no por estar dirigida a niños, que también lo está Monstruos SA y es una buena película. Amparar la mala calidad de una película en que es para niños, me parece pretender estupidizar al público infantil.
La película es demasiado larga, lleva mal el ritmo, los actores son, en general, malos, etc.; pero si te gusta, me alegro mucho por ti. En mi caso es la peor película que veo en años.
No es estupidizarlos, porque el 90% de esos niños ya se han leído los libros y saben de qué va el tema, solo que les hace ilusión verlo "echo realidad" en la gran pantalla. Y desde luego, los libros están mucho más elaborados.
ResponderEliminarNo digo que sea buena, de hecho es una de las que menos me gusta de toda la saga. Pero toda película, como todo libro de Harry Potter está hilado, y lo que nos pueda parecer un detalle nimio y sin ijmportancia en la 2ª o 3ª pueda que tenga algo que ver en la última.
Sí que es larga, y los actores pues no todos destacan, mi favortio seguirá siendo siempre A. Rickman, me parece sublime su actuación. Le da el pego con creces. De todos modos, todos van evolucionando y madurando y eso se ve con el paso de las películas y del tiempo.
Si es que se deberían habe rhecho varias versiones de distintos diretcores y sacra las mejores, porque se ve como algunos le ponen su toque, unos más acertados que otros y claro, es un bamboleo incesante entre peli y peli. Todas deberían estar al mismo nivel porque al fin y al cabo esto no es Rocky I, II o III. Es la continucaicón de una misma historia, y el decho de que tenga cmabios la marea.
Alan Rickman hace un gran papel, es cierto; pero es que en la segunda apenas aparece.
ResponderEliminarNo sé cómo serán el resto; personalmente, gente con cuya opinión coincido prácticamente siempre, me dijeron que la tercera y la cuarta están bastante bien y que ésta es sin duda la peor de todas, al igual que en el caso de los libros.
Y sí me parece estupidizarlos porque la película es horrible, no sólo como historia, que entonces podríamos decir que, en parte, es por problemas de adaptación, quizá. Pero es que es demasiado larga, la historia va a tirones, todo parece avanzar en un escenario cutre de cartón piedra, los personajes son terriblemente planos...
Esos niños crecieron con Harry Potter, es cierto. Los libros tendrán algo, pero al menos no serán tan terriblemente yankees. En algunas escenas de esta película falta una aparición estelar de Will Smith haciendo un chistecillo de los suyos...
Yo estoy plenamente de acuerdo con Albos en que es estas películas son nefastas. Y no sólo como films sueltos, sino como saga en conjunto. ¿Por qué se obstinan en poner en todas las pelis 20 minutos de partidos de quidditch, el deporte más intrascendente del mundo después del béisbol? ¿Para que nos echemos una siesta? ¿Por qué se repiten argumentos y escenas una y otra vez hasta la náusea? Se nota que a JKR le pagaban por página, porque las pocas buenas ideas que tuvo quedan anegadas por toneladas de paja.
ResponderEliminarQue la saga haya sido icónica de preadolescencias tampoco la excusa. En mi caso, fueron icónicas la Dragonlance y El Señor de los Anillos, y puedo decir sin tapujos que la Dragonlance es un truño, aunque con once años la devorase. Supongo que con Potter pasa lo mismo: gusta a su banda de edad, pero objetivamente no es buena.
Conste que yo apoyo plenamente al fenómeno Potter (y no es porque me haya dado dinero): la autora le sacó mucho partido, el editor le sacó mucho partido, y todo el establishment de Hollywood le sacó mucho partido; no les censuro por hacer un producto comercialmente exitoso. Y también apoyo que consiga hacer leer a chavales que en la vida tocarían un libro, bendito sea Potter por eso (esa es su auténtica magia). Pero objetivamente no son buenas novelas ni buenas películas, a pesar de todas las bondades que tengan.