Entradas

Mostrando entradas de junio, 2017

El conde de Montecristo - Alejandro Dumas con Auguste Maquet

Imagen
Edmundo Dantès tenía una prometedora vida por delante: joven, recién nombrado capitán de un buque mercante, con un patrón que lo respeta, un padre que lo adora y prometido a una mujer que lo ama. Dantès lo tiene todo. Pero las envidias de Danglars, quien por antigüedad se creía con derecho a la capitanía del buque, y de Mondego, otro enamorado de la prometida de Dantès, llevan a denunciarlo como agente bonapartista ante la pasividad de un tercer implicado, Caderousse, por haberse detenido en la isla de Elba y aceptar llevar una carta para el señor Noirtier en París. Dantès acaba así preso en el Castillo de If, donde aún recurre al procurador del rey, Villefort, para que investigue el caso y lo libere; pero este, hijo de Noirtier, cuando descubre la verdad, decide que es mejor dejar a Dantès encarcelado de por vida. Edmundo, que lo tenía todo, no tiene ahora nada salvo el encierro y la desesperación; pero el azar lo lleva a conocer al abate Faria, otro preso que intenta abandonar l

Los tres mosqueteros - Alejandro Dumas

Imagen
Los tres mosqueteros es una de las más conocidas novelas de aventuras. D’Artagnan, Porthos, Athos y Aramis son casi leyendas del género. Sea por la lectura de la obra de Dumas, por sus adaptaciones (cualquiera de las películas o series, que incluye una versión de dibujos protagonizada por perros) o por sus remakes (como La guardia fénix , de Steven Brust), todos tenemos una visión más o menos clara de sus personajes; de esos héroes a caballo entre el honor y la bravuconería macarra, y de unos villanos pérfidos encarnados en Richelieu y Milady; pero ¿realmente los dibuja de ese modo la obra original? El rey, el cardenal y los hombres que los sirven Considerando que un héroe es la virtud personificada, es evidente que ni los tres mosqueteros ni su amigo D’Artagnan lo son realmente. Aun con la más amable de las valoraciones, nos encontramos con unos matasietes con ganas de escaramuzas y de demostrar su superioridad; con unos chulos de playa con espada al cinto, vaya. Los mosquetero

Los miserables, diferencias argumentales entre novela y musical

Imagen
Como ya hemos dicho, es inviable afrontar la adaptación de una obra como Los miserables sin asumir que habrá que hacer cambios. Las adaptaciones no son calcos; tienen (o deberían tener) una entidad propia y hay distintas formas de conseguirla. Una de esas formas es que los cambios que se realicen permitan reenfocar ciertos elementos para obtener una cierta personalidad sobre el material narrado. Hoy hablaremos de algunos de los cambios que se hicieron para el musical de Los miserables y de cómo afectan al enfoque de la historia. ¡A las barricadas! Hay dos elementos muy cambiados en las barricadas, uno del que hablaremos ahora y otro del que hablaremos en el apartado Marius Pontmercy. Cuando todo está perdido, los insurrectos llaman a las puertas de los edificios para que los dejen cruzar al otro lado, salir de ese cruce cerrado por la barricada hacia la libertad, hacia la inmensidad de París en la que será casi imposible reconocerlos. En el musical les niegan el acc