El caso Sloane - John Madden


El caso Sloane es un thriller político, dirigido por John Madden (Shakespeare in Love) con guión del primerizo Jonathan Perera, acerca de una propuesta de reforma sobre el control de armas en Estados Unidos


Elizabeth Sloane (Jessica Chastain) es una implacable lobista obsesionada con la victoria, a la que conocemos en un primer plano en el que nos mira mientras nos informa de que en su mundo uno siempre debe ir por delante de sus enemigos y guardarse un as en la manga. Muy sutil todo, Perera, di que sí. El caso es que Sloane es una depredadora política capaz de tumbar reputaciones que parecen inmutables y de conseguir lo imposible. Es la mejor. Encima toma estimulantes para no dormir, para arañar más horas al día y seguir trabajando. Su trabajo es su vida, y sus victorias, su único interés.

Conocemos a Sloane mientras comparece ante el Senador Sperling (John Lithgow) en una audiencia del Congreso que estudia si ha cometido alguna ilegalidad. La narración de la película se remonta a tres meses y una semana antes, cuando rechaza trabajar para el lobby de las armas, quienes quieren conseguir el apoyo de las mujeres ante una propuesta de ley que exigirá pasar más pruebas para adquirir armas. Desde este momento, intercalará la evolución del juicio con otros momentos importantes de esta trama en la que ha elegido apoyar la campaña de la propuesta de ley.


Sloane y su equipo.
Photo by KERRY HAYES

El primer acto de la película es más o menos interesante; pero al segundo le falta fuelle, pospone demasiado algunos giros muy anticipables; y el tercero, al que llega sin fuerzas, se hace eterno. El mayor problema de El caso Sloane es que en todo momento parece creer que sus ideas son sorprendentes; que los giros motivados por el enfrentamiento de esas viperinas astucias resultan impactantes o sobrecogedores; que la inteligencia de los personajes hace, de algún modo, de telón mágico tras el que no vemos nada, tras el que se ocultan las maquinaciones… pero no es así. Los giros y personajes son mecánicos y previsibles. Un buen guión suele presentarte la información que necesitarás para entenderlo, es verdad; pero Perera te lo escupe a la cara de una forma tan evidente que es casi imposible no saber en todo momento qué está pasando, qué van a entender unos y cómo van a reaccionar los otros. La tensión típica del thriller es casi imposible de mantener en esas condiciones, y El caso Sloane acaba prácticamente sustentada en los hombros de Chastain. Qué suerte tienen de tenerla al frente del reparto, porque es lo poco realmente bueno que se puede sacar de esta película. Lo demás, sin ser malo, parece que no acaba de funcionar. Se intuye qué se quería transmitir, pero no se siente. Se adivina el trabajo que hay detrás, pero también, tristemente, todo lo que faltó por pulir.


Otras películas del director:
El exótico hotel Marigold
Shakespeare in Love



Comentarios

Entradas populares de este blog

Charlie y la fábrica de chocolate - Tim Burton

Los miserables, diferencias argumentales entre novela y musical

Ozark (Temporada 1) - Bill Dubuque, Mark Williams